En el día de ayer, en el acto de clausura de la Asamblea Nacional del Sindicato Unificado de Policía, ha tenido lugar la entrega del galardón «Premio Valores Humanos Rosa Crespo» correspondiente al año 2018, debiendo acreditar las personas que se hagan acreedores al mismo un comportamiento desprendido, solidario, de llevar a cabo una acción que resalte el espíritu de sacrificio, el esfuerzo, el riesgo en apoyo de otra persona.
En esta ocasión, el galardonado ha sido para Julián L. S., policía en prácticas destinado en la Comisaría Local de Ronda. Julián, un joven policía nacional de 27 años en periodo de prácticas que, tras haber superado muchos obstáculos, está cerca de cumplir con su sueño desde que tenía uso de razón, formar parte de esta Institución, gracias al sacrificio personal y al apoyo incondicional de su familia.
Julián ingresó como policía alumno en la Escuela Nacional de Policía de Ávila el 11 de septiembre del 2017, perteneciendo a la promoción XXXIII de la Escala Básica, actualmente destinado en la Comisaría de Ronda como policía en prácticas.
El lunes 13 de diciembre del 2018, sobre las 21:40 horas aproximadamente, estando franco de servicio, escuchó unos gritos desgarradores de una persona en las proximidades de la Avenida de Málaga del municipio de Ronda. Sin dudarlo ni un momento, buscó el origen de esos quejidos localizando a un hombre en el suelo con una gran brecha en la cabeza y perdiendo abundante sangre.
Julián, con una gran templanza, puso en práctica lo aprendido en su periodo de formación en la Academia de Ávila, practicándole los primeros auxilios logrando taponar la herida con los medios a su alcance, evitando la pérdida de sangre, a la vez que daba aviso a sus compañeros mediante llamada telefónica al 091.
Tras las pesquisas oportunas, sus compañeros localizaron e identificaron al supuesto responsable de la agresión al que le intervinieron un bastón de acero con el que habría golpeado a la víctima por unas desavenencias. Mientras, la víctima sería trasladada al Hospital de la Serranía de Ronda, donde requirió la friolera de 27 puntos de sutura. La intervención de Julián estando fuera de servicio, ha sido clave para que la víctima no sufriera graves secuelas como consecuencia de la agresión.
Estar fuera de servicio y ayudar y proteger la vida de un desconocido, es un acto de grandeza humana, de solidaridad con los demás y de espíritu de vocación y servicio, que abarca y refleja los mejores valores humanos, que una persona puede reunir.
Este proceder de ayuda al semejante, es lo que motiva que Julián L. S., sea digno merecedor de este Premio Rosa Crespo de los Valores Humanos del año 2018.